Joelvi joven dominicano cantautor romántico urbano nos habla de las motivaciones y las influencias que le han impulsado a emprender su carrera como artista musical.
Biografía Joelvi Tavarez Villanisa
Mi pasión y buen gusto por la música comenzó a muy temprana edad, en casa somos cuatro hermanos, mi padre trabajó en autobús durante muchos años, viajando por los cuatro puntos cardinales, en ocasiones nos llevaba para conocer nuestro país y enseñarnos de que manera se ganaba el sustento.
Lo que más disfrutaba de esos viajes, eran los discos que mi padre ponía, pues contaba con una carpeta de CD’S de buena música, canciones que llegaban al alma y hacían armonía con el paisaje, intérpretes como Jose Jose, Manolo Galvan, Jose Luis Perales, Leo Dan y otros pilares de ese fino linaje musical, fueron alimentando en mí el buen gusto por la música.
Recuerdo que hacíamos pequeños conciertos en el barrio, los vecinos eran ese público maravilloso que unánimes y a coro gritaban «Otra, Otra»…
Y hasta bien pagado el pequeño artista, me daban un peso para que les siga deleitando con lindas canciones, dos de mis favoritas y que nunca voy a olvidar son, La De La Mochila Azul de Pedrito Fernández y Un Gato En La Oscuridad de Roberto Carlos.
Poco a poco fuí descubriendo mi agilidad en escribir poemas y poesías, habitualmente en el colegio uno tiene esos primeros encuentros con el amor y allí escribí mis primeras canciones, inspirado y según yo, enamorado… Jaja.
Años más adelante, cuando tenía 16 años aproximadamente, ingresé a la iglesia, dónde formé parte del ministerio de adoración, ahí estuve durante tres años, los cuales fueron maravillosos, pues fortalecieron aún más mis valores y la belleza de cantar desde el alma.
Para mí la música es ese lenguaje universal que mueve sentimientos y nos conecta con nuestro ser interior.
Es un conjunto de emociones expresadas a través de instrumentos, melodías y acordes que sin importar el idioma hablado, nuestro corazón lo entiende a la perfección.
Amo este hermoso arte que nos regaló papá Dios, pues nos hizo a su imagen y semejanza, de ahí la virtud que tenemos de crear y no tiene problemas la satisfacción de componer, plasmar historias en papel, que dan como resultado final, canciones que se quedan para siempre.